La mirada que nos devuelve el espejo de la paternidad

20:09

 James-Hetherington


No hay mejor cosa para conocerse a uno mismo que perderse en el desierto o a falta de arena bien puede valer, ser padre.
Nada mejor para poner a prueba tus cualidades como ser humano, como ser humano responsable queremos decir ( y medianamente cuerdo debería añadir), que la paternidad o maternidad (dependiendo del lado donde les pille). 

Porque eso es otra de las miles de cosas que tus padres no te cuentan cuando eres adulto y tienes algo de capacidad para escucharles, que ya sabemos que de pequeño el canal por el que emitía tu madre pasaba directo a través de tus oídos, es decir, entraba por uno y salía por el otro, igualico que con los rubios en este momento y con la diferencia de que quien está al otro lado del dial es un servidor.

Decía que nadie te cuenta que es muy recomendable llegar a esta etapa del desarrollo, educación y doma de bichos de metro a metro y medio con cierta dosis mínima de cordura. Y no se confíen porque ese mínimo tiene que ser bastante alto (por su bien), ya que en el proceso se va a perder gran parte de ella, junto con los pelos, los pectorales y las ganas de levantarse otro día.

Todo en su conjunto nos devuelve una imagen de nosotros difícil de reconocer y asociar a aquello que un buen día fuimos y desde luego, nada que ver con aquello que un día allá cuando decidimos eso de dejar de ser dos para ser más, nos imaginábamos ser.


Malos tiempos para los superpadres

No esta siendo una buena temporada, muchas cosas en la lobocueva han cambiado, los peques crecen (por desgracia) y con ellos la complejidad de los problemas. Llevamos ya tiempo, quizás demasiado, perdidos intentando encontrar nuestro lugar de nuevo, ese sitio desde donde veíamos pasar los días y saludábamos a los demás.  Ahora, los días simplemente pasan, uno detrás del otro, sin siquiera detenerse a saludar o preguntar cómo ha ido. Si hace tiempo mi capacidad de planificación se reducía a una semana como
mucho, a día de hoy puedo decir que empieza ya a ser preocupante las horas a las que comienzo a preparar la cena o las horas que, en general, se duermen en esta casa. 

Hace tiempo ya que no hay capitán en el barco, que hemos soltado velas y nos dejamos llevar por la corriente del sur, si sopla, y quizás mañana sea vendaval del noroeste, quien sabe. Es posible incluso que hayamos naufragado hace tiempo y que cada uno viajemos a la deriva en nuestro propio resto del naufragio.

Nunca, en toda mi vida, he estado tan cerca de sentir en mis propias carnes aquellas frases de nuestra infancia que tanto le oía a mi madre: "cuando seas padre me entenderás", "me vais a volver loca", "yo ya no se que hacer con vosotros". Si, por desgracia a sido "por las malas" como he aprendido lo que es intentar criar a dos, por las malas he visto como mi cordura se va reduciendo día a día. Me he mirado en el mismo espejo que mis padres y no me ha gustado lo que este me ha devuelto, no me ha gustado esa sombra que he visto entre el tipo del espejo y yo. Porque he mirado y me ha devuelto ese lado oscuro que nunca nos gusto, ese "nosotros" que sabemos está ahí, vigilando, esperando su oportunidad para salir.

Hoy no me gustó lo que he visto, no sé si porque había idealizado mi imagen en el espejo y esperaba ver algo muy diferente o porque lo que veo se parece mucho a lo que ya viví en otra época, en otro papel. La misma obra caótica sin director ni guionista, en un teatro que huele a rancio y que necesita un lavado a fondo.

Hoy he comprendido esa parte de quienes son mis padres, esa parte que sólo se entiende cuando eres padre y llegas a ciertos límites, esa parte que no quiero ser. Hoy sé que llevo un equipaje que creía haber dejado atrás hace tiempo, hace mucho tiempo. Un equipaje que no necesito pero del que nunca podré deshacerme.

Debo hacer algo con esa imagen que veo en el espejo, pero sinceramente ya no sé que era lo que tenía que cambiar y como se hacía, tan solo sigo remando de espaldas.


Viewminder


Quizás esto te guste...

30 aullidos

  1. No hay padres perfectos. Los míos cometieron muchos errores, pero ninguno imperdonable. Y aquí estoy sin traumatizar y agradeciendo cada día de mi vida la infancia tan maravillosa que me dieron... en general y en conjunto. Porque si nos ponemos a analizar día tras día, hubo broncas, incomprensión, dramas.. e incluso tragedias, porque la edad el pavo me llegó de una forma muy existencialista que pocos hubieran aguantado.

    A veces, a veces los tiraríamos por la ventana. Doy fe. Y decimos cosas terribles. Pero les amamos profundamente, aunque ellos aún no comprendan, ni por asomo, este hecho.

    Yo les digo lo mismo que me decía mi madre, y que te decía tu madre, cuando tengáis hijos me comprenderéis. Y cuando tengas hijos me comprenderán y cometerán también mucho errores, igual que nosotros. Pero ninguno imperdonable.

    ¡Vaya rollo te he echado! Comprenderé si te saltas medio comentario ;)

    Ánimo. Después de una etapa mala siempre viene una buena.

    ResponderEliminar
  2. Pues yo te ánimo a que cambies eso que no te ha gustado. Si lo has visto y se ha descubierto, le han pillado. Curro, sí, mucho seguramente, pero ¿no merece la pena?
    Cambiar lo que no nos gusta de nosotros nos hace sanar, y sanando ayudamos a ser un poco mejores. Perfectos? No, eso no existe. Nos equivocaremos y fallaremos, pero siempre pensando en levantarse, aprender y seguir mejorando.
    ¿alguien dijo que fuese fácil? No. Pero se puede.
    Un fuerte abrazo!

    ResponderEliminar
  3. ¡Qué difícil es esto de la paternidad y maternidad! Pero no seas tan duro contigo mismo, muchas vecesa somos demasiado críticos y simplemente debemos asumir que nos equivocamos. Pero lo más importante es darnos cuenta del error y saber rectificar, pedir perdón o cambiar de rumbo. Mochila tenemos todos, más o menos cargada, pero de la que resulta imposible desprenderse y que, queramos o no, nos acompañará toda nuestra vida. No te obsesiones con intentar borrarla, creo que lo mejor es asumir que forma parte de nosotros y aprender a vivir con ella pero a nuestra manera. De manera que seamos nosotros los que demos el rumbo a nuestra vida y no ella. Son simples consejos que a mi me han funcionado, aunque te diré que yo también tengo rachas y días de esos.

    ¡Mucho ánimo!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Mochila sabía que llevaba, lo que no me esperaba son las cosas que me he encontrado

      Eliminar
  4. Son épocas. Ser padre no es fácil. Ser hijo, tampoco. Pero ambos tienen la misma experiencia en el tema. Y digo yo...¿y si les preguntas a tus hijos cómo mejorar? Tal vez te sorprendan siendo menos duros de lo que estás siendo tú contigo mismo. Besito

    ResponderEliminar
  5. Mucho ánimo capitán! Los locos bajitos estan por y para eso, para volvernos un poco locos, sacarnos de nuestras casillas, llevarnos fuera de nuestras zonas de confort y cuando estamos a punto de tirarlo todo por la borda (ellos incluidos) hacernos recordar las ventajas de tener a estos mini-yos junto a nosotros.
    Soy persona con mochila, con una mochila que hasta ha sido psicoanalizada, y sabe que cambiar no es camino de rosas pero que con voluntad y sobre todo con ánimo se puede llevar acabo.
    Así que no te rindas, no te fustiga es más de lo necesario y de tanto en tanto apoya te en la coca pitan a y deja hacer a los grumetes ;)
    Esperando la segunda parte quedo. ...

    ResponderEliminar
  6. Ciertamente no hay mejor forma de poner los pies en el suelo que tener hijos y mirarte en un espejo de vez en cuando. Esa imagen idealizada de nosotros mismos, como padres ideales se hace añicos cada vez que nos observamos en el dichoso espejo pero creo que no es hay donde debemos mirarnos sino en los ojos de nuestros hijos e hijas, en ellos es donde nos veremos tal y como somos. Les amamos profundamente, hasta el infinito y mas allá pero la vara de medir la tienen esas pequeñas criaturas, en función de lo que nos amen a nosotros sabremos lo bien o mal que lo estamos haciendo.

    Un abrazo compañero de aventuras y desventuras.

    ResponderEliminar
  7. creo que estas hablando de un "zas en toda la boca".. yo con el segundo ya he sentido uno y tiene dos meses, ya veras cuando crezca..

    ResponderEliminar
  8. En la mayoría de las ocasiones somos nosotros mismos los que más nos exigimos. Nos pedimos demasiado y somos tajantes (sino demoledores) en nuestra autocrítica. Date tiempo. Todos tenemos malas rachas. Aléjate unos días. Tómate un descanso (aunque en el caso de la paternidad es muy difícil) y seguro que mirando l realidad con perspectiva encuentras esa salida que ahora, de cerca y con el jaleo diario, no pueden encontrar.
    Bss

    ResponderEliminar
  9. Son rachas amigo y es normal que al final salga ese lado de nuestro padres en el espejo porque al fin y al cabo es lo que hemos recibido y porque cuando la paciencia rebosa su límite nuestras espejo se descontrola. Eso simplemente te hace más humano, mejor padre y imperfecto, al fin y al cabo como todos.

    Me ha encantado el texto pero arriba ese ánimo que luego soy yo la exagerada.
    Besos

    ResponderEliminar
  10. Sólo te digo que estoy contigo.
    Disfruta de los buenos momentos y no te rindas jamás.

    ResponderEliminar
  11. Hola!! Es la primera vez que te leo y me he quedado un poco ojiplática-boquiabierta porque podría haberlo escrito yo misma (seguro que no estaría tan bien escrito) añadiendo una mala racha personal, lo que hace la situación un poquito peor. Pero creo que son etapas, que nos hacen analizarnos, crecer, cambiar, cosas muy necesarias. Nos damos cuenta de que hay cosas en nuestros hijos que se escapan a nuestro control, por mucho que planifiquemos, que utilicemos métodos, su reacción es libre y así debe ser. Crecer no es fácil, pero podemos buscar la manera de ir vaciando esa mochila de todo lo que no nos vale y llenarla de cosas útiles, bonitas y ligeras.

    ResponderEliminar
  12. Buenos días
    Si me permites te animo a que pienses en las pequeñas alegrías que te dan tus hijos. No debemos renegar de nuestra mochila ni de los bártulos que haya en ella. Nos hace ser lo que somos, y si estás en una mala racha piensa que abra mejores. Muchas fuerzas. Un abrazo. Creciendoconnuestrocachorro.WordPress.com

    ResponderEliminar
  13. Ponte serio, pero no dictador y vuelve a coger la correa de tu vida. Sooooo. Y una vez has parado vuelves a andar pero con paso decidido. Lo que arregles ya no dejes que se te vuelva a escapar y sigue poco a poco hasta el orden que deseas y que ellos en el fondo necesitan. Todos podemos pasar por situaciones que no creiamos que las ibamos a protagonizar pero una vez las hemos asumido toca volver a la buena senda, la que sabemos que les hara mejores personas, porque a la larga todo esto es para conseguir que nuestros hijos sean mejores que nosotros, no? Y no te olvides jamás de pedir perdón, y no hacerles responsables de su existencia. Ellos no tienen que comprender más que les quieres y que quieres que sean buenas personas, el resto es impotencia por nuestra parte. Supongo que te digo esto porque me siento reflejado en ti y he necesitado una distancia para verme y no dejarme llevar por el hastío de la rutina, el descontrol.... Ahora viene el verano y es un buen momento para relajarse, preguntar mucho y disfrutar, sin prisas y sin agobios. Que te ayuden en la cocina, que vayáis a dormir todos juntos al comedor....

    ResponderEliminar
  14. Uffff, yo empiezo mi andadura con dos, y no tengo tiempo de pensar o actuar, y sobre todo sín fallarle a ellos ni a mi misma!complicado,muy complicado.
    Ánimo,porque al final lo conseguiremos!
    un besin

    ResponderEliminar
  15. Acabo de descubrir tu blog. Me gusta y me sorprende a la vez. Resulta peculiar escuchar el latido emocional, visceral, de un hombre en el universo paternidad/maternidad. Nils Bergman, el fundador del piel con piel, dice que estos hombres presentan elevados niveles de oxitocina. Sea lo que sea, es agradable leerte. Como bien dice Xavi, no debemos soltar las riendas. Si lo miras desde fuera lo verás diferente. Es tan difícil ser padres. Hagas lo que hagas siempre quedará algo por hacer, como a nuestros padres, de adolescentes los criticábamos y de adultos los comprendemos, justificamos y adoramos. La vida tiene sus idas y venidas. Ya sabes el dicho, cuando terminé el invierno, volverá la primavera. Gracias.

    ResponderEliminar
  16. Me ha encantado este aullido del lobo...

    necesitamos echar fuera dolores no? dejar de comerlos solitos... mucha gente de la que se ha pasado por tu guarida te lo está diciendo... dejaté aconsejar un poquito y aprovecha lo que más te convenga para lamer y relamer tus heridas.

    Un abrazo muyyyyyy fuerte!

    ResponderEliminar
  17. Buff, valiente entrada! Creo que todos tenemos nuestros fantasmas y que a veces lo hacemos genial, bien o un poco peor... A mi me sucede sobre todo cuando estoy estresada en el trabajo, y lo que mas me ayuda es relativizar, la situacion, mi propia influencia sobre las cosas... Y si he hecho algo mal, reconocerlo y pedir perdon! Primer paso para comprometerse a cambiar lo que no nos gusta! Animo! :-)

    ResponderEliminar
  18. Los niños son el espejo mas duro y crudamente sincero que existe. Nos vemos reflejados en ellos, nos hacen vernos reflejados en muchos otros sitios y momentos también... Pero por eso mismo, tambien son los mejores profesores que tenemos. “Se que no se, y se que quiero saber y cambiar” es la primera fase del aprendizaje. Tu ya las has pasado, con eso y con la voluntad de hierro que creo que tienes por lo que te leo, estoy segura de que paso a paso y juntos, lograras deshacerte de esa mochila. ¿Has probado a sentarte con ellos, y hablarles de esa mochila, de tus temores, de lo que nos cuentas en el post? De “niño a niño” claro, pero igual juntos y tratando de formar equipo mas que los bandos a los que naturalmente tienden los peques muchas veces, la cosa mejora mucho. Los niños son muy listos, y si algo les gusta es “jugar a los mayores”. Darles la oportunidad de sentar reglas y de fijar rumbo junto con sus padres, es algo que les puede gustar y motivar para esforzarse por lograrlo. Un abrazo, y mirate con cariño y ternura a ti mismo en el espejo esta noche, que muchas veces somos nosotros mismos nuestros peores jueces.

    ResponderEliminar
  19. Momentos como el tuyo tenemos todos los padres, pero lo importante es pasarlos. Creo que tienes que tener muy en cuenta varias cosas que ya te han dicho:
    - no existe el padre perfecto y NUNCA existirá, aunque puedes estar seguro de que eres el mejor padre que tus hijos puedan tener
    - eso lleva a la segunda anotación: seguramente tus hijos te vean mucho mejor de lo que tú te ves. Nosotros somos los exigentes, no ellos.
    - hablando se entiende la gente. Muchas veces nos sorprende el razonamiento de nuestros hijos, porque esperábamos menos de ellos. Háblalo, exponles tus miedos
    - ten paciencia, todo pasa
    Y si todo esto no funciona, el sábado, con una copa por delante, seguro que lo arreglamos, jijiji.

    ResponderEliminar
  20. Nos creemos muy "listines", y luego es un shock cuando la vida te demuestra que no es así (yo la primera, que ya he tenido un par de shocks que me han dejado la autoestima hecha unos zorros).

    Por suerte se puede estar haciendo bien aunque sientas que no es así.

    Consuélate: sólo tienes que reparar tus propios errores. A mí me toca reparar los míos y los de los que vinieron antes que yo. Te aseguro que no es fácil.

    Lo repito: se puede estar haciendo bien aunque sientas que no es así. Así que adelante.

    ResponderEliminar
  21. A mi me gusta mucho una frase de Ina May Gaskin: "También es bueno practicar el perdón a una misma. Hay que ser compasiva con una como madre" (o padre, añado yo).
    En mi opinión y según mi experiencia la falta de sueño y el agotamiento hacen mella, el mejor consejo que me dieron, y no me gustan los consejos, fue: "cuando el niño duerma, tú duerme también, y a la casa que le dén", aquí el papá de la criatura, hombre práctico dónde los haya, doy fé, una vez me regaló un deshumidificador, ejem, adquirió una secadora, un lavavajillas, y un robot limpia-suelos, donó libros y objetos, menosbulto-menos trabajo-menosquelimpiar-mástiempo, y cuando enseñar a los niños a captar que se nos está acabando la paciencia: "estoy cansada, si se acaba la paciencia aparece la bruji", y el nene ya dice: "netesitas un momento a solas verdad?", cuando desaparezco le pregunta al padre: "mamá dónde está en el baño o paseando a los perros?", tenemos que aprender a delegar y a relevarnos, si estáis los dos a todo, os cansais ambos, nosotros acordamos turnos, cuando uno cuida el otro descansa, buscar los que os funcione a vós.
    Saludos empáticos,
    Verónica

    ResponderEliminar
  22. Fernando... bienvenido a tu nueva vida! Bienvenido a tu nuevo puerto! Bienvenido a tu nuevo destino... si señor... tranquilo que ya has dado el primer gran paso (ese que muchos tardan hasta la adolescencia de los hijos en dar) y es ver tu reflejo en el espejo y caer en la cuenta de que "ese de ahí" no es el que tienes "acá en tu mente".

    Si, señor... si se puede deshacer la maleta, esa mochila se puede dejar de lado, desocupar y volver a llenar con lo que tu tengas a bien decidir... y te lo dice una que tiene aún en el fondo de la suya un lastre que se quedó atascado desde la segunda vez que la rehíce...

    Eres un padrazo... te lo digo y repito, pero ahora que por fin puedo sentarme a escribir con tiempo (ese que tanto nos escasea a todos últimamente) puedo decirte que no has naufragado... tan solo la tormenta os ha sacudido...ahora estas, al menos tu, llegando a nuevo puerto, y de ti depende que la nueva guía de ruta sea fijada por ti y no por tu mochila.

    Te animo, te abrazo y te escucho... porque no estas solo, a todos nos pasa, la vida nos sacude, nos da calabazas y nos pone de patas para arriba... pero nos da la oportunidad de rehacer el camino y mejorar.. porque donde hay amor, todo, absolutamente todo se puede reparar.

    Un abrazo enorme...

    ResponderEliminar
  23. No hay quien pueda con ellos. Paciencia' ya verás como cambiará todo. Un abrazo

    ResponderEliminar
  24. La paternidad es taaaan larga (con suerte nos durará toda la vida) que es normal pasar por épocas en las que saque de nosotros lo mejor y lo peor que llevamos dentro. Sé que me salgo un poco del tema pero quería darte mi enhorabuena porque ¿tú eres uno de esos 2 hombres elegidos para poner cordura en La Party de #malasmadres, no? ¡Valor para afrontar la cita!

    ResponderEliminar
  25. Vamos a ver, Papá Lobo, no me puede creer que bajes los brazos así tan fácilmente. Un día, o dos, si puedes darte a la bebida, jeje, porque pienses que te has convertido en tu padre, o que los días son iguales, pero todos tienen su punto distinto, y sobre todo, sois vosotros como familia, quienes hacéis que todos los días sean distintos.
    Que hay momentos de desesperanza, o de frustración, o de algún grito porque nadie me comprende ni me ayuda, pero... tienes todas las bazas bajo tu sombrero (entiéndase la metáfora) para sacar adelante la paternidad con nota.

    ResponderEliminar
  26. Hmm it appears like your blog ate my first
    comment (it was super long) so I guess I'll just sum it up what I wrote and say, I'm thoroughly enjoying your blog.
    I as well am an aspiring blog writer but I'm still new to
    everything. Do you have any tips and hints for first-time blog writers?

    I'd really appreciate it.

    my web page - Judy Neinstein (www.43things.com)

    ResponderEliminar
  27. What's up all, here every one is sharing such know-how, therefore it's good to read
    this web site, and I used to pay a quick visit this blog daily.


    Review my web-site: Greg Neinstein (http://scriptogr.am)

    ResponderEliminar

Popular Posts